El sistema de rastrillos del tanque de sedimentación secundaria es un componente de precisión fundamental para el proceso de lodos activados. Su función principal es separar y devolver suavemente el floc biológicamente activo (lodos activados de retorno, o RAS) al tanque de aireación, eliminando simultáneamente el exceso de lodo tratado (lodos activados de desecho, o WAS) para su posterior procesamiento. El floc biológico en estos tanques es ligero y frágil; por lo tanto, el sistema de rastrillos debe operar con extrema precaución para evitar la ruptura de las partículas floculentas y que estas se re-suspenjan en el efluente, lo que provocaría una alta turbidez y violaciones a las normativas permitidas. Los mecanismos de rastrillo para decantadores secundarios circulares suelen diseñarse con una rotación lenta y continua, y cuchillas cuidadosamente anguladas para minimizar la turbulencia. En una planta municipal de tratamiento de aguas residuales, el rendimiento de este sistema está directamente relacionado con la salud de toda la unidad de tratamiento biológico. Un rastrillo fiable y bien mantenido garantiza un flujo constante y de alta calidad de RAS, manteniendo la población necesaria de microorganismos en el tanque de aireación para una eficaz descomposición de la materia orgánica. Por el contrario, un rastrillo defectuoso puede provocar un fallo del proceso, incluyendo la salida de sólidos y una disminución de la eficiencia del tratamiento. Debido a la naturaleza crítica de esta aplicación, los rastrillos de los tanques secundarios están construidos para ofrecer la máxima fiabilidad, contando a menudo con materiales no corrosivos capaces de soportar el entorno húmedo y diseños que permiten realizar mantenimiento sin necesidad de vaciar el tanque grande.